by tatoElla se despertó con un cosquilleo en la garganta. Era algo muy preocupante para Ashly Burch que, a sus 27 años, ya es toda una estrella en ascenso en el pequeño mundo de los actores de voz. Ella es muy conocida por su trabajo en los videojuegos. Así que al salir de su casa esa mañana, Burch bebió una relajante mezcla de té chai y leche de arveja. «No es un producto lácteo, porque la leche crea una especie de moco y no hace un buen sonido», explica.
Ahora, con un pie dentro del estudio insonorizado cerca de Santa Monica, no da ninguna muestra de incomodidad al tiempo que se prepara para grabar nuevas líneas para Horizon Zero Dawn, uno de los lanzamientos más populares del año.
«¿Cómo está tu garganta?», le pregunta el director.
«Bien», contesta ella mientras un monitor mostraba el texto que tenía que leer.
Los actores de voz, cada vez más, están en la primera línea de una transformación que se está imponiendo en la industria del entretenimiento a medida que converge la creatividad de Hollywood y la innovación de Silicon Valley. La voz, ese marcador íntimo de la emoción humana, ahora se considera esencial para el mercado de los videojuegos, una industria que mueve USD 24,5 billones, donde los gráficos son hiperrealistas y las historias que se usan en los juegos pueden ser ambientados en los mejores dramas de cine. Y los mejores actores de voz, sus nombres son muy populares entre los fanáticos y promovidos por las compañías, pueden convertirse en celebridades a pesar de no aparecer nunca en pantalla.
Sin embargo, los actores de voz de esta industria no son tratados como actores de televisión y de cine. Esto llevó a que estos profesionales fueron a una huelga contra 11 de los desarrolladores de videojuegos más grandes.
¿El motivo?
Querían mejorar el pago de bonificación y la seguridad, como el estrés vocal. La amarga disputa laboral se prolongó durante 11 meses y esta situación ha hecho que se convirtiera en la huelga más larga de la historia del mayor sindicato de actores de Hollywood, el SAG-AFTRA. Burch se vio obligada a renunciar a un papel aclamado por la crítica, a pesar de que ella quería hacerlo. Los fanáticos de los juegos temían retrasos en sus títulos favoritos antes de que se llegara a un acuerdo tentativo.
La prolongada huelga puso de relieve cómo los videojuegos han surgido como la escena de un tenso enfrentamiento entre Hollywood y Silicon Valley. Los actores de voz quieren ser tratados como actores de cine y televisión, ya que se consideran fundamentales para el proceso creativo. Las empresas tecnológicas, a menudo, ven a los desarrolladores e ingenieros como las verdaderas estrellas del espectáculo.
«Siguen diciendo: ‘los videojuegos son diferentes», explica J. B. Blanc, conocido actor de doblaje y director que ha trabajado con Burch en varias ocasiones. «Pero eso no es verdad porque los juegos quieren ser películas y las películas quieren ser juegos. Básicamente son películas con más de 100 horas de duración», apostilla en ese sentido.
Un par de días antes de su sesión con Horizon Zero Dawn, Burch estaba en las oficinas de Cartoon Network, en Burbank, para grabar las voces de OK K.O.! Let’s Be Herores. Gracias a este tipo de trabajos, Burch y otros actores de voz han podido mantenerse a flote mientras se prolongaba la huelga y desaparecían las audiciones para los videojuegos.
Otra actriz, Courtenay Taylor, mencionó que sufrió una hemorragia en sus cuerdas vocales el año pasado mientras trabajaba en el juego. La mayoría de las lesiones provienen de la emoción, como los gritos. Pero ella se lastimó susurrando y tuvo que visitar a un patólogo del habla para hacer rehabilitación. Ante esa situación, ella no pudo trabajar durante tres meses.
«Puedo mostrarte algunas imágenes bastante duras si quieres» comenta Taylor sobre unas fotos de sus cuerdas vocales dañadas.
Otros actores dijeron que habían notado sangre en sus gargantas durante las largas sesiones de trabajo. Un actor, incluso, se desmayó durante una audición después de gritar durante bastante tiempo.
La naturaleza de los videojuegos dificulta el trabajo. Muchos juegos presentan personajes muriendo o gritando en agonía. Se necesita un actor para hacer cada uno de esos sonidos. Burch trabajó una vez en un videojuego de temática militar que requería que todos sus textos fueron leídos a gritos durante cuatro horas.
El año pasado, el sindicato invitó a la División de Seguridad y Salud Ocupacional de California a investigar lo que calificó como condiciones inseguras y estresantes para los actores que hacen videojuegos. Antes de que los reguladores se negaran a tomar medidas, el sindicato les reprodujo la grabación de un actor que hacía un típico «grito de muerte».
«No podían creer que estuviéramos gritando así durante cuatro horas», relata Keythe Farley, otro actor.
Incluso los juegos más tranquilos y basados en la historia requieren mucho diálogo porque contienen docenas de horas.
«Te esfuerzas por hacer estas voces porque quieres ayudar en el trabajo, y ahí es donde te lastimas», lamenta Kate Flannery, otra actriz de OK K.O.
Durante la huelga, el sindicato solicitó que la sesión regular de cuatro horas se redujera a la mitad por considerarse un trabajo estresante. Pero el acuerdo tentativo incluye solo la promesas de que las compañías trabajarán con el sindicato para examinar el problema durante un período de tres años.
