Una fuente de la compañía japonesa reveló cuál será el elemento que promete experiencias de juego más rápidas.
Mark Cerny, arquitecto de PlayStation 4 y la próxima PlayStation 5, se sumó a las voces que comenzaron a revelar últimamente detalles técnicos sobre la futura consola de Sony. Entre ellos, se destaca la presencia de un disco SSD (solid-state drive, en inglés) que será incluida para lograr uno de los objetivos de la compañía: otorgarle a la máquina una velocidad tal que termine con las fastidiosas pantallas de carga.
Según declaraciones a la revista oficial PlayStation, número 162, que aparecerá el próximo 9 de junio, Cerny explicó cómo este SSD mejorará la experiencia de los videojuegos en PS5, y lo que significará para este nuevo integrante de la familia de consolas japonesa.
«Un SSD de ultra alta velocidad es la clave para nuestra próxima generación. Nuestra visión es hacer que las pantallas de carga sean cosa del pasado, permitiendo a los creadores construir experiencias de juego nuevas y únicas», aclaró el ingeniero.
Un ejemplo de la relevancia que tendrá este tipo de disco lo evidenció el videojuego Spider-Man, donde los tiempos de carga que en PS4 eran de unos 15 segundos se redujeron con la estación de desarrollo de PS5 a 0.5 segundos, lo que supone un avance muy significativo.
A su vez, esta característica permitirá a los juegos renderizar los gráficos cada vez más complejos de forma más rápida, ofreciendo a los usuarios una calidad que se acerca a la visión real de los desarrolladores.
A estos datos sobre el disco SSD (Solid State Disc) de PS5 hay que sumar las especificaciones técnicas que se dieron a conocer en las últimas semanas. Un chip de tercera generación AMD Ryzen conformará la CPU que contiene ocho núcleos de los nuevos 7nm Zen 2. La GPU será una variante personalizada de la familia Navi de Radeon, y tendrá compatible con raytracing, una tecnología utilizada habitualmente en los efectos especiales de Hollywood.