La llegada de Disney+ y su amplia variedad de títulos animados, es la excusa ideal no solo para recomendar varias ficciones de esa plataforma, sino también para bucear en otras señales streaming y descubrir qué clásicos animados de lo ochenta (y otras décadas) vale la pena volver a ver.
Heidi
Cualquier televidente que hoy ronde los cuarenta años, y haya visto mucha televisión de pequeño, probablemente recuerde perfectamente a Heidi. El mítico dibujo de los setenta saltó las fronteras de Japón, y se erigió como uno de los primeros éxitos de la animación japonesa a escala global. Su estética infantil, de la que participó el enorme Hayao Miyazaki (director de Mi vecino Totoro) cautivó a espectadores de todas las edades, y aún hoy es un clásico absoluto que no perdió su encanto. Como parte de su catálogo para los más chicos de la casa, Amazon Prime Video incluyó este título, junto a otros dos imprescindibles de la animación japonesa de esa época, Marco y Remi, el niño de nadie. Hermosa combinación para llorar en continuado.
Disponible en Amazon Prime Video.
X Men
Muchos años antes de convertirse en una de las franquicias más rentables de Hollywood, los X-Men protagonizaron una popular ficción animada. En 1989 Marvel produjo un piloto para una eventual serie que por problemas financieros, nunca llegó a concretarse. Pocos años después, una productora retomó la idea y puso en marcha una temporada inicial de trece episodios. Por esa época, el cómic de los X-Men era un bombazo en materia de ventas, y la posibilidad de unos dibujos basados en esa historieta era un negocio asegurado. De ese modo, en octubre de 1992 se estrenó en los Estados Unidos esta serie que pronto se convirtió en un verdadero éxito. Lejos de limitarse a historias maniqueas,el título sorprendió por sus elaboradas tramas, que sumergían a los mutantes en cuestiones vinculadas al holocausto, el fanatismo religioso, y la discriminación.Los protagonistas eran víctimas de todo tipo de prejuicios, y sus aventuras escondían una lectura social que dejó huella en la televisión de esa época. Luego de muchísimos años sin poder verse en ningún canal infantil, finalmente los X-Men regresaron a las pantallas.
Disponible en Disney +.
Los pitufos
Clásico inoxidable, Los Pitufos marcaron a decenas de generaciones desde su creación en 1958, cuando debutaron en las páginas de la historieta Franco-belga Johan y Pirluit. Estos personajes, que inicialmente aparecieron como secundarios invitados, rápidamente tuvieron su propio cómic y en 1981, su serie animada. Y para Los Pitufos, que en Europa eran un fenómeno comparable a Tintín o Astérix, la animación supuso la conquista del mundo. Niños y niñas de todos los países descubrieron a los diminutos seres azules, y el fanatismo alrededor de ellos creció exponencialmente. Por esa época, Argentina no fue la excepción a esa moda, y durante muchos años Los pitufos fueron un éxito durante las tardes de lunes a viernes. Gracias a un encanto que trasciende el paso del tiempo, ya sea con esta serie animada o con las historietas, reencontrarse con Los Pitufos siempre supone una grata experiencia.
Disponible en Amazon Prime Video.
Mazinger Z
De Gundam a Evangelion, el de los robots gigantes es un género que nunca dejó de producir obras maestras, pero pocos lograron la fama mundial de Mazinger Z. Aquí el protagonista es Koji Kabuto, un temerario joven cuyo destino es el de convertirse en el piloto del gigantesco Mazinger. Acompañado de Sayaka y Boss, quienes manejan a Afrodita y Robot Boss respectivamente, Koji luchará incansablemente contra el Doctor Infierno y sus planes por conquistar la Tierra. Desde su estreno, este título gozó de un inmenso éxito alrededor del mundo, y eso le permitió permanecer en pantalla durante muchos años. Y cuando Netflix la incluyó en su catálogo, muchos fans argentinos volvieron a disfrutar de esta querida saga.
Disponible en Netflix.
El Tío Rico MacPato, protagonista de Patoaventuras
Si bien la nueva adaptación de Patoaventuras es una de las sorpresas más gratas de los últimos años en materia de animación, la serie clásica persiste como uno de los grandes títulos de Disney. Con un total de cien episodios, emitidos originalmente entre 1987 y 1990, Patoaventuras cuentan las innumerables travesías del Tío Rico, junto a sus tres sobrinos, Hugo, Paco y Luis. La serie se basó en los cómics de Carl Banks, un brillante historietista que creó un atractivo mundo alrededor del Pato Donald, en el que pronto se destacó su tacaño tío. El gran éxito de Patoaventuras tuvo que ver con que Disney apostó por alejarse de la comedia, y poner el acento en las peligrosas misiones que protagonizaban los patos, y que mezclaban elementos de la ciencia ficción, el terror,y referenciaba a películas de la época como Indiana Jones y los cazadores del Arca perdida (un film que a su vez, tomaba elementos de la historieta clásica del Tío rico). En los ochenta, esta serie fue un éxito rotundo, y Disney se entusiasmó tanto con la favorable respuesta del público, que lanzó otros títulos en la misma tónica como Darwing Duck, Chip y Dale al rescate o Aventureros del aire.
Disponible en Disney +.
Steamboat Willie, de 1928, debut cinematográfico de Mickey Mouse
Aunque no es una serie en sí, la amplia oferta de cortos clásicos disponibles en Disney+ siempre vale la pena recomendarlos. Luego de una ausencia de años (o décadas) de las pantallas argentinas, la plataforma streaming recuperó para el público local varios de aquellos cortometrajes protagonizado por Mickey, Donald, Chip y Dale, y muchos más de los personajes fundacionales de la casa. De esa forma, los adultos pueden volver a ver (y los más pequeños descubrir) piezas inolvidables como El barco de vapor Willie, El pequeño torbellino, Un dragón en los alrededores, Árboles y flores, o El paquete sorpresa de Pluto. Por último, también hay que destacar a Los tres caballeros, el largometraje protagonizado por Donald, José Carioca y Panchito, que entre sus muchos segmentos incluye a El gauchito volador, el corto inspirado en la Argentina.
Disponible en Disney +.
Astroboy
Angustiado ante la dramática perdida de su hijo, un científico construye un niño androide de aspecto igual al de su pequeño, pero dotándolo de distintos súper poderes. Sin embargo, lo maltrata constantemente y termina por venderlo a un circo. El destino finalmente lleva al robotito a manos de un brillante científico, quien lo adopta y lo alienta a luchar contra las injusticias. Y así nace Astroboy, el niño androide. Creado en 1968 por Osamu Tezuka (el padre de la historieta moderna en Japón), el personaje fue un hit inmediato, y a lo largo de las décadas posteriores protagonizó varias series y hasta un largometraje producido en Hollywood. Y de todas esas adaptaciones, la producida en 1980 aún es la más querida por el público.
Disponible en Amazon Prime Video.
Spider-Man y sus amigos
Junto a Batman, Spider-Man es el otro superhéroe que cuenta con la mayor cantidad de títulos animados. Desde su creación en los sesenta, Peter Parker lleva a sus espaldas más de una decena de adaptaciones, y de todas ellas, Spider-Man y sus sorprendentes amigos es una de las más recordadas. Aquí el protagonista comparte sus aventuras con el Hombre de hielo, un personaje de la formación original de los X-Men, y Estrella de fuego, una joven heroína creada exclusivamente para este dibujo. Si bien los episodios responden a un esquema que presenta pocas variantes, con un villano apareciendo en escena y el trío de héroes buscando la forma de derrotarlo, la amplia galería de invitados enriqueció notablemente cada una de las historias. De ese modo, a lo largo de los episodios que la integran, aparecen populares nombres como Doctor Doom, Doctor Strange, el Capitán América, Magneto, Loki, los X-Men, Thor y hasta Tony Stark. El título duró apenas 24 capítulos distribuidos entre 1981 y 1983, pero su éxito se prolongó durante muchos años más. Y si bien al día de hoy la animación resulta un poco acartonada, el encanto de estas historias aún perdura.
Disponible en Disney +.
Como extra les dejamos «Power of Grayskull: The Definitive History of He-Man»
En el año 2017, Netflix estrenó este documental que repasa la importancia de He-Man, el personaje que inspiró una serie de dibujos animados. Esa serie, cuya función primaria fue la de generar demanda ante el lanzamiento de una colección de juguetes, inesperadamente se convirtió en uno de los fenómenos culturales más importante de los años ochenta.